El 8 de enero de 2021, la Corte Suprema de los Estados Unidos aprobó un auto de avocación en Sánchez v. Wolf, un caso que aborda si una concesión de Estatus de Protección Temporal (TPS) autoriza a los no ciudadanos elegibles a solicitar la residencia permanente legal. Puede encontrar una copia de la Petición aquí.
Actualmente, existe una división entre los Tribunales de Circuito de los EE.UU. en este tema. El Sexto y Noveno Circuito han sostenido que una concesión de TPS cuenta como una admisión para el ajuste del estatus. El Undécimo Circuito, sin embargo, ha sostenido que el TPS no constituye una admisión. Sánchez v. Wolf proviene del Tercer Circuito, mismo que se unió al Undécimo Circuito al sostener que TPS no constituye una admisión para propósitos de ajuste de estatus.
El Estatus de Protección Temporal (TPS) es una forma temporal de estatus migratorio otorgado a ciudadanos de ciertos países que se han considerado inseguros para regresar debido a conflictos armados, desastres ambientales u otras condiciones extraordinarias. El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) puede otorgar TPS a nacionales elegibles que ya se encuentran en los Estados Unidos, lo que les permite permanecer en el país y obtener autorizaciones de trabajo y viaje.
Sánchez v. Wolf plantea la cuestión de si un beneficiario de TPS puede solicitar un ajuste de estatus. Para ser elegible para el ajuste de estatus, el solicitante debe demostrar que fue inspeccionado y admitido o entró con la libertad condicional a los Estados Unidos bajo la Sección 245 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA). Los peticionarios en este caso argumentan que un inmigrante que no ha sido admitido, inspeccionado o entró con la libertad condicional a los Estados Unidos debería ser elegible para ajustar el estatus si se le ha concedido el TPS.
La decisión de la Corte Suprema tendrá grandes consecuencias para los beneficiarios de TPS. Si la Corte Suprema se pone del lado del Undécimo y Tercer Circuito, los beneficiarios de TPS que ingresaron ilegalmente a los Estados Unidos no serían elegibles para solicitar la residencia permanente legal. Muchos beneficiarios de TPS han estado residiendo en los EE. UU. durante décadas y, una decisión desfavorable podría obligarlos a regresar a sus países de origen. El caso está actualmente pendiente y la Corte Suprema escuchará los argumentos orales en los próximos meses.